He escuchado que el gobierno ha dado su brazo a torcer en la lucha por controlar el desarrollo de la pandemia del virus AH1N1. No sé si será verdad, pero parece porque donde vivo ya cualquier gripe o resfrío es porcino. Yo, por ejemplo, que tengo un resfrío de la patada, estoy expuesto a las miradas desconfiadas y temerosas de la gente. Ya no se puede toser sin sentimiento de culpa. Estornudo en el antebrazo y siento la aprobación de los transeúntes; si me miran a los ojos y los ven como están, todo inyectados, casi me compadecen y se alejan.
Son los tiempos de la cochina gripe porcina. En el Perú ya se han muerto 6. Las autoridades de salud dicen 5 y se equivocan, error que obedece a esa tendencia a considerar al aun no nacido como inexistente. Y es que van 6 porque la señora embarazada murió junto a su hijo.
Y ahora tengo a mis dos hijos revoloteando en casa. Si tuviera ventilador de techo estarían colgados y dando vueltas como "Rayita", el gremlin más rayado. Es que el gobierno ha adelantado las vacaciones para evitar una propagación mayor de este mal y creo que no hace tan mal. De todas maneras, creo que el control de esta enfermedad está en la misma población, en su moderada precaución, sin pánico, sin cosas raras.
Achís!
