Para mis pequeños lectores quinceañeros (si los hay) el título de esta pequeña entrada es un homenaje a doña Carmencita Lara una cantante de aquellas allá por los 70 que se especializaba en las penas y amoríos. Una suerte de hermana Yaipén en ritmo de vals peruano.
Pero a lo nuestro. Una marca de cerveza se ha propuesto instaurar el día del amigo. La idea no es original, ya que la misma transnacional lo había hecho antes con Quilmes en Argentina instituyendo el día del amigo el 20 de junio. Seguro que a medida que se acerque la fecha la cosa se va a poner divertida. A lo mejor habrá conciertos y espectáculos, ofertas, promociones y demás. No critico eso.
Lo que merece un poquito de análisis es la banalización de la noción de amistad. Es verdad que se puede tomar unas cervezas con los amigos pero no son ellas (las chelas) las que generan ni mucho menos refuerzan el vínculo amical. Te acepto que se llame el día del pata, o el día de la mancha u otro término afín.
Una raya más al código de barras. Este primero de julio se incrementarán las ventas de cerveza y la gente seguirá pensando que es el trago el que nos une a todos los peruanos. ¿Cuándo nos sacudiremos de esos conceptos que distorsionan el verdadero sentido de la realidad?
Mi esposa amenaza con criticar esta entrada medio cucufata. Yo me curo en salud: Es probable, esta entrada es medio cucufata y debe ser porque no me gusta la cerveza ni la amistad borrachosa.
Paso, comparito (como dicen en Chiclayo) y no se me ofenda.
